Simba es un gato de otro planeta. Parece un perro. Es el animal más noble, bueno, cariñoso, simpático y juguetón que he conocido, además de precioso y elegante. Ni se le pasa por la cabeza arañar ni morder a nadie nunca, es el amor hecho gato. Además, posa de maravilla. Se deja hacer de todo con mucha paciencia, hasta se queda dormido a veces mientras le corto las uñas. Tenéis que conocerlo, os enamorará como me enamoró a mí.